El fiscal general de la república, Alejandro Gertz Manero, ya tiene en su escritorio los documentos que demuestran que Felipe Calderón, Genaro García Luna y Eduardo Medina Mora permitieron al gobierno estadounidense ingresar armas a territorio nacional para equipar a los cárteles del narcotráfico, así lo informó el periodista Óscar Balderas en un artículo publicado este día en el portal EME EQUIS.
La organización (Des)arma México, el Seminario sobre Violencia y Paz de El Colegio de México y el despacho jurídico Schütte y Delsol Gojon Abogados presentaron evidencias ante la FGR que probarían que altos funcionarios del gobierno calderonista mantuvieron conversaciones con autoridades estadounidenses para permitir ingreso masivo de armas a México.
Correos electrónicos y cables clasificados desmontarían la versión de que Felipe Calderón no estaba enterado del operativo «Rápido y Furioso», con lo cual se le podría configurar al expresidente el delito de traición a la patria.
‘Rápido y Furioso’ fue un operativo que comenzó a implementarse a finales de 2009 y por el cual ingresaron al país más de 2.000 armas de alto calibre con el objetivo de ser rastreadas.
El mes pasado el Gobierno de México solicitó oficialmente a EEUU información respecto al operativo ‘Rápido y Furioso’, que comenzó a implementarse a finales de 2009 y por el cual ingresaron al país latinoamericano más de 2.000 armas de alto calibre para ser rastreadas, informó el canciller Marcelo Ebrard.
«Si en efecto, como apunta la evidencia descrita, el Gobierno de México conoció y autorizó el operativo estaríamos ante graves violaciones a la Constitución Política», y las leyes nacionales por parte de quienes ocupaban los más altos cargos, puesto que habrían mentido al Congreso y a la sociedad«, comentó el canciller mexicano
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