Un nuevo escándalo de violencia contra la mujer sacude al fútbol mexicano días después de que Renato Ibarra, jugador del América fuera detenido por agredir físicamente a su esposa.
El columnista Ignacio Suárez del diario deportivo Récord reveló en su columna que un joven futbolista del primer equipo de los Pumas acosó sexualmente a una empleada del club universitario. Los directivos del equipo lejos de apoyar a la víctima, protegieron al individuo y despidieron a la empleada que laboraba como profesora.
Marco Antonio García fotografió las partes íntimas de la profesora sin su consentimiento, posteriormente difundió las imágenes por WhatsApp. La víctima, al percatarse, denunció la situación ante las autoridades del equipo, pero nunca hubo sanción para el futbolista y ella terminó siendo separada de su cargo.
Este caso es muy lamentable, Pumas es el equipo que representa a la universidad más importante del país. En la UNAM han emergido importantes grupos feministas que han visibilizado el acoso que cientos mujeres sufren por parte de profesores y empleados de la máxima casa de estudios.
No debe haber espacio para la impunidad en la UNAM.
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