El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ofreció su tradicional conferencia de prensa matutina desde el hangar presidencial, donde se encuentra desde el 22 de julio el avión del primer mandatario, el Boeing 787 José María Morelos y Pavón.
«Hacer esta rueda de prensa con el avión del fondo es para dar a conocer al pueblo de México cómo se malgobernaba al país, cómo había lujos en el Gobierno durante todo el periodo neoliberal. Se le daba la espalda al pueblo, sobre todo a la gente humilde, a la gente pobre y los altos funcionarios vivían colmados de privilegios, de atenciones. Era un gobierno de ricos para ricos con un pueblo pobre», comentó el presidente.
Subrayó que todavía hay quienes aspiran que continué este tipo de gobierno mientras la 4T se compromete a transformar el país.
«Ya no es un gobierno al servicio de una minoría», prosiguió.
Al continuar su rueda de prensa el mandatario invitó a los periodistas entrar en el avión.
«Con las fotos, con las cámaras pueden estar transmitiendo para que la gente conozca el avión por dentro, que todos sepan cómo es este avión», dijo. Para él, la aeronave no es solo monumental y faraónica, sino representa «un insulto para el pueblo mexicano habiendo tanta necesidad y tanta pobreza».
Acordó que todo lo que se obtenga de la rifa del avión será para equipar los hospitales.
Luego de 19 meses en California, Estados Unidos, donde se le dio mantenimiento, la aeronave Boeing 787-87 TP-01 llegó al hangar que se ubica en la Base Aérea Militar 19, en las instalaciones de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM), en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).
El avión fue adquirido por la Administración de Felipe Calderón Hinojosa en 2012 por 218 millones de dólares, equivalente a 2.900 millones de pesos, aunque fue entregado al Gobierno de Enrique Peña Nieto al año siguiente. Sin embargo, al asumir la presidencia, López Obrador decidió ponerlo en venta.
El director de Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), Jorge Mendoza Sánchez, dio a conocer el 13 de julio que el Gobierno mexicano recibió una oferta de compra por la aeronave, valuada en 2.500 millones de pesos.
El mantenimiento del avión presidencial en Estados Unidos tuvo un costo aproximado para el erario de 1.567.500 dólares. Aunque ese gasto podría ser mayor, ya que el costo de estacionar una aeronave en el aeropuerto de la ciudad californiana de Victorville es de 2.750 dólares por día.
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